SAP

La entrada de hoy no va de trapitos, ni de tuneos, ni de recetas de cocina, la verdad es que no es un tema nada bonito, pero considero que es necesario difundirlo, y que mejor que esta ventana.
Alguien puede pensar que voy a hablaros del famoso software de gestión, o de una sentencia de la audiencia provincial (tiene las mismas siglas)  pero no, no voy a hablaros de eso,  hoy quiero hablaros del Síndrome de alienación parental.
Para acompañar la lectura hoy os dejo parte de la banda sonora de una película que en clave de comedia cuenta las peripecias de un padre  divorciado que se disfraza y se hace pasar por una señora mayor para hacer de canguro de sus hijos y poder pasar tiempo con ellos, protagonizada por el recientemente fallecido Robin Williams.

Es muy posible que no hayáis oído hablar del SAP nunca, pero es algo que existe y que tal vez cuando explique lo que es no suene tan raro, incluso conozcáis algún caso.
Enamorarse y ser correspondido es una de las cosas más bonitas que le pueden pasar a una persona, pero el amor en ocasiones se acaba y afortunadamente hoy día no estamos condenados a vivir con alguien a quien no amamos o que no nos ama, o las dos cosas a la vez.
Si llega alguna de estas tres situaciones la salida más lógica es la separación de la pareja, ya sea con un divorcio si ha habido matrimonio anterior o simplemente con una separación si no ha habido vínculo matrimonial.

El problema surge cuando hay hijos, y uno de los dos miembros de la pareja actúa egoistamente y se olvida del sufrimiento que para un niño o adolescente supone el hecho de que sus padres se separen, él no deja de querer a su padre ni a su madre y ni por asomo desea que su madre o su padre dejen de quererlo, ese pensamiento puede llegar a ser aterrador para él.
En esos momentos el niño necesita seguridad, que alguien le tranquilice y le haga ver que tanto su madre como su padre le van a seguir queriendo igual, lo único que va a cambiar es que no vivirán todos juntos como hasta ese momento, algunos niños acostumbrados a grandes broncas en casa es posible que hasta agradezcan la separación, hay estudios que lo atestiguan.

Hasta aquí la teoría, muchas parejas lo han sabido hacer muy bien y sus hijos han salido indemnes del proceso de divorcio de sus padres, desde aquí mi felicitación,  pero en la práctica en muchos casos esto no sucede así, y lo que pasa es que uno de los dos progenitores comienza una guerra contra el otro en la que desgraciadamente implica al hijo o hijos sin darse cuenta del gran daño que le está haciendo a ese niño o niños, en ese momento comienza el SAP
En el síndrome de alienación parental el progenitor  con el que conviven los hijos, es decir, el que tiene la custodia,  normalmente suele ser la madre, comienza una etapa en la que no cesa de criticar al otro progenitor en presencia de los hijos, a meter en sus cabecitas la idea de que el otro progenitor , normalmente el padre, es malo,  haciendo todo lo posible para que esos niños lleguen a odiarle, hasta el punto en el que los hijos llegan a negarse a ver al otro progenitor, en ese momento el progenitor que tiene la custodia termina su trabajo, ha conseguido que sea el propio niño el que no quiere ver al otro, literalmente le ha lavado el cerebro.
El niño que unos meses atrás adoraba a su padre y a su madre  y estaba convencido de que tanto para uno como  para el otro él era lo más importante, se convence de que el progenitor con el que no convive  no le quiere, mientras tanto ese progenitor sufre lo indecible por no poder ver a su hijo al que sigue queriendo tanto como siempre.

Este tipo de comportamiento suele suceder por venganza hacia la expareja  porque ésta le ha dejado , o porque no desea perder su estatus económico y utiliza a los hijos como moneda de cambio, o las dos cosas juntas, la verdad es que lo de menos es el motivo.
Lo verdaderamente importante es el sufrimiento que estos niños alienados tienen ¿ como de mal se tienen que sentir al pensar que su padre o madre no les quiere?  ¿ cuánto sufren? ¿ cómo es posible que una madre o padre no se den cuenta del daño que sus palabras pueden hacer en ese niño?? ¿ hasta donde puede llegar el egoísmo de una persona para pasar por alto todo esto?
" no te quiere y te ha abandonado para irse con otra persona"  " prefiere el dinero a vivir contigo"   "es una mala persona que no te quiere"   " si vas a verle me estás traicionando y conseguirás que yo tampoco te quiera" estas y otras frases lapidarias son las que los niños que sufren SAP  escuchan, en algunos casos llegan a convencer a los niños de que ha existido maltrato o abusos para poder denunciar al ex

Los niños son totalmente manipulables y es muy fácil conseguir que no quieran ver ni en pintura al otro progenitor, y luego jactarse diciendo " es el niño el que no quiere verle"  claro que no quieren!!!! porque el otro progenitor se ha encargado de conseguirlo.
Hay casos sangrantes en los que se pueden oir conversaciones en las que un hijo le dice a un padre      " eres un indecente"  a lo que el padre responde " y eso que es?? " y el niño le contesta " no lo se pero lo eres"  , este es un ejemplo claro de que esas palabras que salen por la boca del menor no son propias sino aprendidas.
Si los niños son menores de 12 años se puede exigir judicialmente el verlos, eso sí, de mala manera en un punto de encuentro y con unos niños que gritan y lloran deseando irse porque ya tienen el lavado de cerebro hecho, por tanto el progenitor los ve pero ¿ en qué condiciones? y lo más importante, el niño está sufriendo en esa situación
Si ya han cumplido los 12 ellos son los que deciden, y si no quieren ir con el progenitor no custodio no se puede hacer nada, nadie puede obligarle u obligar al progenitor custodio a que haga lo posible para que el niño acceda de buen grado a ir con el otro padre.
En muchos casos el progenitor alienado después de luchar meses o incluso años, acaba tirando la toalla, esperando que el niño crezca y decida por sí mismo para poder volver a verlo y estar con él, el problema es que nunca lo hará, el daño está hecho.

Resumiendo un poco estos son los indicadores de la existencia de SAP

- Insultar o desvalorizar al otro progenitor en presencia del hijo, aludiendo cuestiones de pareja que no tienen nada que ver con el vínculo parental.

- Impedir el derecho de convivencia con sus hijos al otro progenitor.

- Implicar al entorno familiar y a los amigos en los ataques al excónyuge.

- Subestimar o ridiculizar los sentimientos de los niños hacia el otro progenitor.

- Incentivar o premiar la conducta despectiva y de rechazo hacia el otro progenitor (basta con que los niños vean que esa actitud hace feliz a la madre o al padre, para ofrecer su dolor y así reconfortar al adulto alienador).

- Influir en los niños con mentiras sobre el otro llegando a asustarlos. En los niños, el Síndrome de Alienación Parental puede detectarse cuando intentan justificar el rechazo con explicaciones o razones absurdas e incoherentes. En ocasiones, también pueden usar diálogos o frases propias de su progenitor alienador, y palabras o comentarios impropios de su edad.

Los niños que sufren SAP pueden tener graves secuelas psicológicas en su futuro, amén del sufrimiento durante todo ese proceso de "lavado de cerebro" , de hecho  el SAP está considerado como maltrato psicológico, y en ocasiones se han retirado custodias a progenitores que estaban alienando a sus hijos.
Por favor, pensemos en los niños, intentemos no hacerles más daño del que ya les hace el divorcio de sus padres, no seamos egoístas, son nuestros hijos, lo que más queremos, no lo olvidemos.....